“Caminaba por la calle y escuché gritos dirigidos a mí y a mi cuerpo. Me giré y tomé conciencia de que me tenía que proteger. Entré en pánico al recordar otras agresiones trans que había visto en los medios de comunicación y redes sociales. Era incapaz de procesar que esa agresión me estuviera ahora pasando a mí”.
Uma es una mujer trans, estudiante universitaria, con altas capacidades intelectuales. Ha tenido que soportar en las aulas que el profesorado siga dirigiéndose a ella por el nombre que se le asignó al nacer y no de acuerdo con el nombre sentido y el género con el que se identifica. Además de las experiencias de violencia en las aulas, un día, en la calle, un grupo de hombres la agredieron sexualmente; la atacaron con comentarios sobre su cuerpo y le arrancaron su ropa para comprobar, según los agresores, si era una mujer o un hombre. La historia de Uma es el resultado ficcionado de casos reales analizados que configuran un ejemplo de las violencias sexuales dirigidas hacia los cuerpos y las vidas de las mujeres trans, doblemente silenciadas y vulnerabilizadas.
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